Habitualmente, por estas fechas, todos tenemos los ojos puestos en Kingston y en la localidad que corresponda de los Estados Unidos para disfrutar a distancia de los Campeonatos de Jamaica y de Norteamérica, las dos dictaduras de la velocidad mundial. Suelen lograrse marcas excepcionales y se asiste a competencias maravillosas. Son los famosos Trials, aunque no siempre los campeonatos nacionales de las dos superpotencias de los hombres y mujeres rápidos tienen este carácter. Porque Trials significa prueba selectiva para algo.

En este caso los Nacionales de Estados Unidos no son Trials, porque no hay competición para la que clasificarse. En Jamaica, sí, porque los caribeños tienen como uno de sus objetivos los Juegos de la Commonwealth, una cita muy importante para las ex colonias británicas, en la que no participa Estados Unidos, por cierto.

Pues bien, en Kingston y en Sacramento se están celebrando estos días los campeonatos de los dos países más poderosos de la Tierra en las distancias cortas. Y la noticia no es quién corre, sino quién no corre. Por desgracia. 

Vamos con Jamaica. No están en el Estadio Nacional Usain Bolt, Yohan Blake, Asafa Powell, Shelly-Ann Fraser-Pryce… Los dos primeros tuvieron lesiones y se reservan; Powell ha visto como se congelaba su sanción por dopaje e iba a competir, pero resulta que tiene un virus; Shelly-Ann alega una pequeña lesión. Bolt, por cierto, se postula para el relevo 4x100 metros en los Juegos de la Commonwealth.

Y vamos con Estados Unidos. Ni Tyson Gay, cuya sanción por dopaje se redujo de dos a un años y ya podría competir, pero no lo hace, ni Justin Gatlin, que se reserva, como Tyson, para otras batallas.

Resultado, que en velocidad los campeonatos se nos han quedado en casi nada en los 100 metros, aunque los dos países tienen materia prima suficiente para ofrecer buenos resultados. Por ejemplo, en Jamaica Nickel Ashmeade ha ganado con 10.06 y una ventolera de 1,5 metros por segundo en contra, y, entre las chicas, Veronica Campbell-Brown se ha impuesto con 10.96 y una brisa contraria de 0,4.

Y en los Estados Unidos, triunfo para Mike Rodgers (10,09) y Tianna Bartoleta (10.92).

No son malos resultados, pero nos saben a poco.

Y es que, definitivamente, me parece que este no va a ser el año de los 100 metros, salvo que cambie mucho la situación.

A estas alturas de la temporada, en 2014, el mejor registro pertenece al trinitense Richard Thompson (9.82) y hay siete atletas que han bajado de los diez segundos, con un total de once carreras.

El dato contrasta con el mismo de 2013. Entonces la mejor marca era de Tyson Gay (9.75, no anulada oficialmente, a lo que parece) y diez atletas habían roto la barrera de los diez segundos, con un total de veinte carreras.

Yo lo que espero es que dentro de algunos días o de muy pocas semanas todo dé un vuelco. De lo contrario nos encontraremos con un año que no pasará a la historia.