Nadie le discute su papel de líder de este Atlético. Griezmann se ha ganado, en especial el año pasado, su papel de bandera colchonera y que ya le consideren a punto de discutir a Cristiano y Messi su papel de los reyes del fútbol mundial, pero es el momento de que el francés comience a hablar en el campo. Que se deje de poner buenas caras y se vuelva a encontrar con el gol-diez partidos sin enchufar, nueve de ellos oficiales- me parece una pasada que debería preocuparle de manera clara. Además ha perdido hasta la ubicación que le hacía el factor diferente o le permitía dar asistencias al resto de sus compañeros. Puede ser que todavía siga dando vueltas al penalti que falló en la final de Milán o como se le fue la Eurocopa con Francia, pero son obstáculos que tiene que ir superando.

Esta noche ante Las Palmas sería el momento ideal para volver a ser la bandera de los sueños cholistas. Esta noche mismo sería el mejor momento posible. Esta Copa tiene un sabor especial por intentar conseguirla en la despedida del Calderón y la realidad es como el primer gran reto. Se tiene que olvidar de estar corriendo los noventa minutos y que los técnicos le dejen solamente en la defensa adversaria para convertirse en la peor de sus pesadillas. Incluso a este nivel que tenga claro que tantos admiradores como tiene pueden desaparecer y al final la cotización alta se consigue en función de lo que enseñas y demuestras en el campo.

Juanfran vuelve a ser un ejemplo de amor a los colores y a Simeone. Juanfran en cambio no se tapa y vuelve a demostrar que es el Atlético a tope. Simeone le ha pedido que vuelva a ser un interior derecho y se está dejando el alma, a costa incluso de asumir que va a tener más que complicado la posibilidad de volver a ser llamado para la Selección. Su profesionalidad está por encima de todo.

Saúl está convencido de ser una pieza fundamental en la recta final de esta temporada. El que también ha comenzado lanzado es Saúl. Le están dando la máxima confianza y se siente liberado de ser como antes el jugador número doce. El Cholo sabe que tiene que darle una vuelta de tuerca a la composición de su centro del campo y por eso hasta no le ha parecido mal la opción de Giménez. Ya se acabaron las excusas.

Correa se merece más oportunidades o puede pensar en su salida para jugar de manera regular. El que debe estar mosqueado es Correa. Me sigue pareciendo que es un valor con un futuro tremendo al que se le conceden pocas opciones y encima siempre fuera de su puesto. No es extraño que comience a valorar opciones como la de irse al Boca o a otro equipo que le permita jugar de manera regular, algo que no está sucediendo y que le está impidiendo seguir creciendo como jugador.

La final de la Champions del 18 se quiere para el Metropolitano. En las oficinas lo que van a aumentar son los contactos con el Gobierno a la conclusión de las fiestas. Saben que de Fomento dependen las salida que son necesarias de la M-40 para su nuevo estadio y hasta el apartado de cercanías. Esperan que el trato sea el adecuado y que al final para el próximo mes de septiembre todo los rojiblancos puedan presumir de su Wanda Metropolitano y que por cierto, Cerezo y Gil Marín, tienen la intención de solicitar a la UEFA que sea el escenario de la final de la Champions del 2017.