Pedaladas

Vamos a hablar de ciclismo, pedalada a pedalada. De sus gestas y de sus miserias. Desde mi experiencia como periodista en treinta grandes vueltas y en otras múltiples batallas...

Autor: Juan Gutiérrez

Günter Haritz: victoria, tiritona y positivo en Baza

De la provincia de Jaén (Jódar) a la de Granada (Capileira). Ese itinerario de hoy llevó también la cuarta etapa de la Vuelta a España de 1976, pero entre Jaén y Baza. Günter Haritz (Heidelberg, 1-10-1948), un pistard alemán especialista en los Seis Días, dominó aquel 1 de mayo con un ataque a 20 km. Etapa y liderato en una jornada que los cronistas de la época describieron con expresiones como “día de perros”, “frío polar”, “lluvia a raudales”, “calados hasta los huesos”, “los dientes castañeaban”, “tiritonas”... Los cambios bruscos de tiempo eran una constante con la carrera en primavera.

Günter_Haritz

Las inclemencias meteorológicas provocaron el abandono de 15 ciclistas. Uno más llegó fuera de control y otros cuatro fueron repescados. Entre los retirados se encontraba Jesús Líndez, que se había fugado en los primeros kilómetros. Fue uno de los cinco jóvenes corredores del Novostil-Transmallorca que echaron pie a tierra.

Joaquim Agostinho y Enrique Martínez Heredia estuvieron escapados sin éxito en aquella etapa. El Ti-Raleigh dominaba la carrera. Haritz saltó para preparar el terreno a Hennie Kuiper o Dietrich Thurau, pero logró ganar ante la pasividad de los equipos españoles. Unos días después se comunicó su positivo con un estimulante, que en esa época se castigaba sólo con pérdida de tiempo: la etapa pasó a Kuiper y el maillot a Javier Elorriaga.

(LA RUTA DE LA VUELTA: Jódar-Capileira, 7ª etapa)