Pedaladas

Vamos a hablar de ciclismo, pedalada a pedalada. De sus gestas y de sus miserias. Desde mi experiencia como periodista en treinta grandes vueltas y en otras múltiples batallas...

Autor: Juan Gutiérrez

La Operación Puerto: diez años de luces y sombras

La Operación Puerto cumple 10 años este lunes 23 de mayo de 2016. En este periodo ha dejado un regusto agrio, un sabor a operación inacabada. Pero si somos capaces de inmunizarnos de esa lluvia de mensajes contrarios y nos transportamos al ciclismo español de hace un decenio, podremos comprobar que la desarticulación de esta trama también ha dejado buenas cosas para el deporte.

Se ha escrito mucho sobre la Operación Puerto, demasiado, así que no voy a elaborar aquí un amplio informe. Simplemente voy a desgranar, casi a bote pronto, cuáles han sido esas cosas ‘buenas’ y ‘malas’. Las luces y las sombras. Al menos desde la perspectiva de quien esto escribe. Allá voy:

SOMBRAS

-La identificación únicamente de ciclistas entre los implicados ha aumentado las dudas sobre el deporte español, sobre todo cuando hasta el mismo instructor, Enrique Gómez Bastida, reconoce que la investigación empezó por un caso de atletismo y que hay otros deportes inmersos. El sumario muestra, por ejemplo, el seguimiento de unos boxeadores. También existen indicios de que habría bolsas de Marta Domínguez.

LUCES

Basti

-Hasta la Operación Puerto no existía una Ley Antidopaje ni una Agencia Española Antidopaje. Dos años antes, cuando Jesús Manzano confesó las prácticas del pelotón en AS, se comenzó a trabajar en la construcción de ambas por parte de Jaime Lissavetzky, entonces secretario de Estado para el Deporte. Esta operación fue el empujón definitivo. La Agencia funciona actualmente más o menos bien, tras el impulso de Ana Muñoz Merino y de Gómez Bastida. Es triste no poder decir lo mismo de la aplicación de la Ley.

SOMBRAS

-La identificación de sólo una parte de los ciclistas implicados también provocó sospechas, sobre todo en la opinión pública internacional. Alejandro Valverde tuvo que ser identificado y castigado en Italia. Y Luis León Sánchez, por poner otro ejemplo, aparece en el primer tomo del sumario, pero luego su nombre se diluye hasta evaporarse.

LUCES

JUICIO

-En aquella primera década del siglo, España era señalada como un paraíso del dopaje. Francia, Italia o Bélgica luchaban contra esta lacra, pero aquí se hacía la vista gorda. La Operación Puerto quitó inicialmente esa etiqueta, al desmontar una red con ciclistas muy importantes: Ullrich, Basso, Hamilton, Botero, Mancebo, Beloki, Sevilla, Etxebarria, Nozal…

SOMBRAS

-Aquella primera percepción sobre la Operación Puerto se fue diluyendo cuando se profundizó sobre otros nombres que no habían sido revelados. Valverde es el caso más conocido. Además, el juez instructor Antonio Serrano denegó las pruebas y no se pudieron abrir expedientes en España, mientras que Alemania sí castigaba a Ullrich o Italia a Basso. Tras el juicio oral, hace tres años, volvieron a ser denegadas por la magistrada Julia Patricia Santamaría.


LUCES

-Aunque en España no se pudo castigar administrativamente a ningún deportista, un acuerdo tácito en el ciclismo impidió que los corredores relacionados con la Operación Puerto pudieran competir en equipos de élite. Eso sirvió de sanción en la sombra.

SOMBRAS

UFE

-La dilatación del caso sin una solución y, sobre todo, la tozudez de los jueces de no conceder las pruebas para incoar expedientes alargaron en exceso el limbo jurídico en el que vivían esos ciclistas vetados en la élite. Con el tiempo, algunos pudieron retornar a equipos importantes, como Rubén Plaza o Ángel Vicioso, pero otros han tenido que alargar sus carreras siempre en escuadras modestas y secundarias, como Paco Mancebo u Óscar Sevilla.

LUCES

-Los medios de comunicación eran generalmente muy reacios a informar sobre dopaje en aquella época. Y si lo hacían, quedaban marcados para los deportes o para los deportistas implicados. Incluso para otros periodistas. Actualmente, todos los medios de comunicación tienen algún experto en dopaje y se informa con naturalidad de cualquier cuestión. No siempre acertadamente, pero al menos el asunto ha dejado de ser tabú.

SOMBRAS

-La Operación Puerto tardó casi siete años para celebrar su juicio oral, tras superar dos archivos y dos reaperturas de la causa, y ahora ya suma tres años sin haber resuelto los recursos en la Audiencia Provincial de Madrid. Se anunció un veredicto inminente para principios de 2016, que no se ha cumplido. La lentitud de la justicia acrecienta las dudas sobre la política antidopaje española.

LUCES

OP

-Por primera vez en la historia del deporte y de la justicia españoles ha habido condenados por una caso de dopaje. Se trata del médico Eufemiano Fuentes y del preparador y técnico Ignacio Labarta. El instructor policial está convencido de que las condenas hubieran aumentado a cuatro si Alberto León no hubiera perdido la vida y si Merino Batres no hubiera quedado fuera del juicio por una enfermedad.

SOMBRAS

-Según la ley española de aquel momento, las faltas de dopaje que hubieran cometido los deportistas implicados en la Operación Puerto ya habrían prescrito (concretamente, a los tres años). También si se aplica el pasado reglamento del Código Mundial Antidopaje, que marca 8 años. Y a partir de este lunes 23 de mayo de 2016, incluso tampoco se podrían abrir expedientes con la nueva versión de la AMA, que establece 10 años. La OP ha prescrito, en cualquier caso. Salvo que un juez dictamine que los expedientes administrativos quedaban paralizados durante el proceso jurídico.

LUCES

-La Operación Puerto consiguió apartar del ciclismo a personajes relacionados con las trampas y con el dopaje. Al menos, teóricamente. Y digo teóricamente, porque por ejemplo directores como Manolo Saiz o Vicente Belda nunca se han ido del todo y siempre han aspirado a volver. Ya no están en equipos de élite, pero continúan en contacto con el ciclismo: Saiz está en el equipo Aldro y Belda en la organización del Campeonato de España de Cocentaina.

SOMBRAS

MANZANO

-Aunque algunos técnicos de la época han quedado apartados, otros técnicos coetáneos con los mismos hábitos han continuado en el pelotón, después de que ninguna bala les impactara directamente. Como se suele decir: han salido de rositas.

LUCES

-El discurso de importantes estamentos del ciclismo ha cambiado desde la Operación Puerto, como por ejemplo en relevantes organizadores como la Vuelta a España. Ya no navegan en la misma ambigüedad que en 2004 con Jesús Manzano. El discurso, al menos, ahora es claro. Tolerancia cero (¡qué frase más desgastada!). No les quedaba otra solución ante la espantada de patrocinadores.

SOMBRAS

-La política y la ambigüedad antidopaje de las autoridades españolas, tanto gubernamentales como olímpicas, acabaron calando de forma tan profunda en la opinión pública extranjera que castigó con dureza dos candidaturas de Madrid a los Juegos Olímpicos: 2016 y 2020. La Operación Puerto fue una losa para sus aspiraciones.

LUCES

-La Operación Puerto abrió la veda a otras operaciones policiales antidopaje. Hay que recordar que en aquel 2006 no había una ley penal antidopaje y, aun así, pudo prosperar. Con la aprobación de la Ley, las herramientas han aumentado para los jueces y para la autoridad policial.

SOMBRAS

-No ha vuelto a organizarse una operación de las dimensiones de la OP. Lo más parecido fue la Operación Galgo, pero fue instruida chapuceramente y se sobreseyó. También han salido impunes otros sospechosos habituales, como en el caso del remo y la Operación Estrobo. Últimamente, la actividad policial es menor. Bien, por desinterés de los jueces. Bien, porque no hay voluntad política. O bien, porque las condenas son menores. Pero se mueve poca cosa.

LUCES

-La incautación de dos centenares de bolsas de sangre demostraron la veracidad de las denuncias de Jesús Manzano en 2004 sobre un dopaje generalizado en el pelotón de la época. Las posteriores confesiones del sancionado Lance Armstrong confirmaron aún más estas prácticas, si todavía quedaba alguna duda.


SOMBRAS

-Diez años después, las bolsas todavía no han sido identificadas. La juez Santamaría dictó su destrucción. Y la Audiencia Provincial de Madrid podría ratificar esa sentencia. Las bolsas permanecen aún en el Laboratorio de Barcelona, pero se desconoce su futuro. Aun si fueran puestas a disposición de las autoridades deportivas, será muy difícil conocer la propiedad de toda esa sangre. En el exterior se sospecha que ahí hay todavía importantes nombres sin desvelar. Y no solo ciclistas. Un agujero difícil de tapar.

LUCES

-Cada vez son más los deportistas comprometidos con la lucha antidopaje. Y cada vez son más los que se atreven a alzar la voz contra los tramposos. El ciclismo quizá tenga todavía esa asignatura pendiente, más que otros deportes como el atletismo. El camino es lento. Esperemos que repleto de brotes verdes.