Nos quedamos sin noticias. Pasado el draft y cerrada la actividad, no queda casi nada que contar más allá de lo que pueda decidir la corte de apelación. Siempre hay algunas pildoritas, pero la mayoría saben a muy poco.
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Solo por hacer un pequeño resumen, los Vikings están cada vez más cerca de cerrar un acuerdo con Mark Dayton, gobernador de Minnesota, para que el nuevo estadio del equipo se construya con financiación estatal, local y de la franquicia, a unos 10 kilómetros al norte de St. Paul. Después de muchos años de duras negociaciones, parece que el conjunto púrpura no viajará a California.
También hay rumores de que la NFL estaría dispuesta a detener todas sus operaciones financieras (en otras palabras, cerrar el chiringuito del todo) si la corte de apelación decide impedir el lockout en la próximas horas. La decisión judicial provisional se esperaba la semana pasada, pero se ha retrasado unos días. Ese paso significaría, literalmente, un cierre de negocio. Según estos rumores, la NFL pretende llegar a ese extremo y mantenerlo hasta que se llegue a un acuerdo laboral. Por ahora son solo rumores y espero que no tengan demasiada base. Si la NFL está dispuesta a cerrar la puerta con llave solo por una decisión cautelar que impida el lockout hasta que haya una sentencia firme, no es difícil imaginar que tampoco esté dispuesta a ceder, ni a hacer ninguna concesión, en la negociación del convenio colectivo. Esa ha sido la queja de los jugadores desde el primer día. Según la NFLPA, la NFL hacía concesiones en sus declaraciones públicas que luego se volvían irreales cuando se matizaban en las negociaciones. Insisto en que me parecen solo rumores sin demasiado fundamento, pero si fueran reales, la NFL quedaría definitivamente retratada y ni siquiera los que aún defienden su postura tendrían muchos argumentos para hacerlo. No creo que los aficionados pudieran perdonar nunca ese paso.
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Otra historia que me ha llamado la atención es la pérdida de contratos publicitarios que ha sufrido Rashard Mendenhall después de criticar en Twitter a la gente que celebró la muerte de Bin Laden. El jugador intentó justificar su comentario diciendo que los pocos caracteres que admite Twitter le impidieron matizar suficientemente su afirmación. No voy a entrar a valorar si tenía razón o no, pero si voy a dar mi opinión sobre la oportunidad del comentario: ¡Rashard, eres un membrillo!
mtovarnfl@yahoo.es
