Como sabréis, los propietarios han ratificado el nuevo convenio laboral con 31 votos a favor. Al Davis, propietario de los Raiders, se abstuvo, pero todos sabemos que al viejo zorro siempre le ha gustado cantar por las mañanas y dar la nota. No creo que discrepe de nada, simplemente le encanta ser diferente.
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Los jugadores siguen sin firmar. Parece que el motivo es que están valorando sus opciones legales, más pensando en el futuro que en el convenio actual. Los propietarios siempre han afirmado que la descertificación de la NFLAP era ficticia y un ‘subterfugio’ de los jugadores para obtener ventajas jurídicas. Volver a certificarse de un día para otro parece que le daría la razón a los propietarios (no me preguntéis el motivo, son cuestiones legales). DeMaurice y compañía están buscando la fórmula para ratificar el acuerdo evitando perjuicios futuros.
En resumen, es una situación exclusivamente legal que no pone en peligro el acuerdo, simplemente retrasa unas horas su firma.
Parece que la agencia libre se abrirá, definitivamente, el próximo miércoles. Jugadores y clubes podrán empezar a negociar en el momento en que la NFLPA ratifique el acuerdo, pero no podrán firmar nuevos contratos hasta el miércoles.
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Lo que queda totalmente descartada es la celebración del amistoso del Hall of Fame entre Rams y Bears. Las normas de la NFL exigen 12 días de entrenamiento antes de participar en el primer amistoso de la temporada. No quedan días para cumplir la norma así que la fiesta del Salón de la Fama quedará algo deslucida este año. No creo que a casi nadie le importe demasiado. Ya hemos hablado muchas veces de que los partidos de agosto tienen muy poco interés real para los aficionados, que solo ven jugar a los titulares en uno o dos drives, y mucho para los entrenadores, que los necesitan para decidir la configuración final de sus plantillas. Además, esta temporada bastantes equipos pueden jugar sus primeros amistosos pendientes de la contratación de jugadores importantes en la agencia libre.
He estado revisando algunos artículos sobre los problemas de algunos equipos para mantenerse dentro del límite salarial y dan números muy diferentes a los que yo he publicado. Un ejemplo son los Packers. En la tabla que yo publiqué estaban muy por encima del límite y, sin embargo, en otras que he visto ayer y hoy aparecen holgadamente por debajo. No se explicaros el motivo por el que han cambiado tanto los números cuando son tablas publicadas en los mismos medios con pocos días de diferencia. Espero que alguien me lo sepa aclarar. Uno de vosotros me preguntaba en los comentarios qué pasaba si un equipo no se mantenía dentro del límite (120 millones en 2011). La NFL no es como la NBA, en la que hay muchos subterfugios para falsear el límite e incluso se puede superar sin problemas solo pagando a la liga una cantidad similar a la rebasada. En la NFL nadie supera el límite. No se contempla esa opción. Bueno, en realidad sí que se contempla, pero las multas y las sanciones son tan graves que ningún equipo se plantea pasarse de listo.
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También quería contaros un par de cotilleos. El carrusel de presuntos interesados en McNabb sigue girando. Según varios medios ahora son los Dolphins los mejor colocados para hacerse con los servicios del jugador. Los seguidores de los Vikings pueden respirar tranquilos. El segundo rumor tiene a Kevin Kolb como protagonista. Según parece ya está buscando casa en Phoenix. Los Cardinals siempre aparecieron en las apuestas como los más interesados en el QB de los Eagles y, aunque las negociaciones han estado prohibidas durante el lockout, esto es como las meigas; haberlas hailas.
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Por último, alguno me preguntaba en los comentarios quién había ganado la batalla del lockout. Creo que la conclusión final es que ambas partes tienen razones para considerarse ganadoras.
Los jugadores tendrán menos entrenamientos de pretemporada, más días de descanso y estarán más protegidos contra las lesiones. El aumento constante de los ingresos de la NFL cada año, junto a la introducción de partidas que antes estaban exentas en la repartición de beneficios, asegura que sus sueldos no mermarán, sino que al principio se mantendrán y muy pronto crecerán al mismo ritmo que hasta ahora. También han conseguido que los equipos estén obligados a invertir en sueldos una cantidad mínima muy próxima al límite salarial (el 90%). Los jugadores retirados se beneficiarán de un aumento significativo en los programas que la NFL dedicará a ellos, tanto médicos como de protección económica. Los jugadores novatos parecían los más perjudicados hasta hace un par de semanas, pero parece que solo serán los elegidos en primera ronda los que sufrirán un tijeretazo serio. Creo que todos pensamos que era un tijeretazo razonable y necesario. Los contratos que estaban firmando en los últimos años eran decididamente injustos y casi escandalosos para jugadores que aún no habían demostrado nada. Además, dejaban en muy mala situación a los equipos que los elegían si no alcanzaban las expectativas.
En el caso de los propietarios, no han conseguido sacar adelante su proyecto de ampliar dos partidos la temporada. Ese es su único lunar. A cambio le han dado un buen mordisco a su porcentaje de ingresos (de casi el 15%), han firmado un acuerdo de larga duración (10 años) en el que se encuentran mucho más a gusto que hasta ahora y, sobre todo, han dado un golpe de autoridad en sus relaciones con los jugadores.
En el fondo, creo que todos, unos y otros, están dando palmas con las orejas.
mtovarnfl@yahoo.es
