Consejos y estrategias para triunfar (o no) en fantasy football – Versión 2014
Tras unos meses ausente del Zona Roja y 40 días en Brasil cubriendo el Mundial de fútbol con AS, llega el verano y, despacito, empieza a oler a football. Pero como todavía no han empezado los partidos de pretemporada y apenas han comenzado los Training Camps, nada mejor que volver hablando de 'Fantasy Football'.
Dentro de dos o tres semanas la mayoría de vosotros vais a estar drafteando vuestras ligas y toca aprender con las lecciones que nos dejó el año pasado para hacer un plan vencedor para la próxima temporada.
Los que seguís el blog y han leído mis artículos sobre Fantasy ya sabéis mi historia. Llevo más de una década jugando ‘fantasy football’ y, aunque al principio era solo un pasatiempo y un estímulo para seguir toda la NFL y no solo mi equipo, los últimos cinco años pasé a jugar Fantasy “profesionalmente”.
Lo hice porque me di cuenta de que dedicaba demasiado tiempo a mis equipos de para que solo fueran una diversión y, como dejarlo nunca fue una opción porque me gusta demasiado, me decanté por lo que en EE.UU. llaman de ‘Ligas de Altas Apuestas’ (High Stakes Fantasy Football Leagues).
Son como los torneos profesionales de póker. En Internet las hay que cuestan a partir de 15 euros la inscripción, con ‘draft’ online y premios desde 75 euros. Pero las más importantes llegan a costar 3500 euros la entrada, con ‘draft’ presencial en Las Vegas y premios de hasta 200.000 euros.
Hasta el año pasado, había ganado la mitad de las ligas que participé. Pero gracias a una temporada surrealista y algunos errores que espero no volver a cometer, 2013 fue catastrófico y salí, literalmente, de manos vacías. ¡Un fracaso absoluto!
Además de la lección de humildad y la impresión de que hacía falta rever mis conceptos y estrategias, vale para recordar de cómo ‘Fantasy football’ es impredecible. Si uno juega para ganar, corre el riesgo de que le vaya muy bien o fatal. No tiene sentido entrar pensando en ser cuarto o quinto. Es todo o nada. Pero dentro de esta filosofía bastante agresiva que yo adopto y recomiendo, tras un 2013 sencillamente BRUTAL para aquellos que juegan Fantasy, este año creo que es más importante que nunca no sobreactuar en las primeras dos o incluso tres rondas.
En este texto quiero compartir algunas recomendaciones básicas para tener en cuenta antes de comenzar una liga de fantasy, además de unas cuantas estrategias que utilizo o que voy a utilizar este año.
Y mi primer consejo es que no las utilice sin consultar otras fuentes.
Lea el mayor número de medios especializados que pueda, estudie diferentes puntos de vistas y forme tu propia opinión y estrategia. Porque, al final, el equipo es tuyo y, a la gloria o al fracaso, siempre es mejor ir con tus propias convicciones.
Lección de 2013: Minimice riesgos en las primeras rondas del draft
En Fantasy, los dos primeros jugadores que drafteas no ganarán solos tu liga. Pero sí que pueden ser los responsables del fracaso de tu equipo.
El año pasado, 17 de los Top 30 jugadores de prácticamente todas las listas de fantasy en pretemporada fueron una gran decepción.
Los que han drafteado a CJ Spiller, Ray Rice, Julio Jones, Trent Richardson, Doug Martin o David Wilson entienden muy bien a que me refiero.
Solo dos de los cinco running backs que estaban previstos como Top 5 en los draft terminaron entre los diez mejores al final de la temporada. Y eso que Adrian Peterson estuvo a punto de terminar el año fuera de los top 10, detrás del ‘abuelito’ Fred Jackson.
Por otro lado, seis de los diez mejores wide receivers han logrado mantener su status de pretemporada. Apenas dos de los top 10 no estaban previstos entre los 20 mejores en pretemporada.
Históricamente, siempre se ha dicho que la base de un equipo de fantasy son sus running backs y, por eso, era fundamental draftear a uno en la primera ronda. Pero últimamente, si fiabilidad es la palabra clave al principio del draf, no hay dudas que vale mucho más la pena apostar en un WR de confianza como Demaryius Thomas o Brandon Marshall o incluso en un fenómeno como Jimmy Graham antes de un running backs con problemas de lesiones como DeMarco Murray o Arian Foster. Yo diría incluso que me lo planteo si no vale más apostar en alguien como Dez Bryant, A.J. Green o Jordy Nelson antes de jóvenes que todavía no han probado que pueden aguantar toda una temporada como protagonistas, como Monte Ball y Gio Bernard. Así como CJ Spiller, Trent Richardson o David Wilson el año pasado ofrecía un potencial increíble, si las cosas no salen como se espera el resultado es de pesadilla.
Por lo tanto, en los dos primeros rounds de este año, yo me fío de apenas cinco o seis running backs y, caso estos no estén disponibles, apostaré por Graham o uno de los siete u ocho top wide receivers.
Tengo así a mi Top 20 a día de hoy, un mes antes del inicio de la temporada:
Jamaal Charles
LeSean McCoy
Adrian Peterson
Matt Forte
Demaryius Thomas
Jimmy Graham
Calvin Johnson
Dez Bryant
Brandon Marshall
Eddie Lacy
Le'Veon Bell
A.J. Green
Monte Ball
DeMarco Murray
Julio Jones
Giovani Bernard
Jordy Nelson
Antonio Brown
Randall Cobb
Arian Foster
Piense bien y tome tu propia decisión. Pero recuerda que la NFL es imprevisible y ya existen demasiadas lesiones para que te arriesgues sin necesidad al principio del draft. Tus primeras elecciones son demasiado importantes para desperdiciarlas con un jugador dudoso.
Ahora repaso mis consejos para que intentes sacar el mejor provecho de tu temporada de fantasy.
El Draft es la fecha más importante de toda la temporada;
Apunte el día y la hora de su draft y no lo pierda. Este es el equipo que USTED va a llevar durante TODO el año. No deje en las manos de un ordenador la tarea de escoger sus jugadores.
Confirme las reglas de su liga y esté preparado;
Antes de entrar en un draft, confirme la puntuación. Si la liga tiene ‘flex’, si los ‘flex’ también aceptan TE, si hay jugadores de defensa, etc. El caso más corriente es cuando una liga tiene puntos por recepción (PPR).
En una liga con PPR, running backs como Matt Forte y Gio Bernard tienen muchísimo más valor que en una liga donde solo cuentan sus carreras. La misma regla vale al revés para Marshawn Lynch o Alfred Morris, por ejemplo, que son running backs que pocas veces aparecen en el juego de pase y, por eso, pierden mucho valor en ligas de PPR.
No se fíe de los rankings de la web que organiza la liga. Tenga siempre en manos su lista con los 200 mejores jugadores, separados por posición (la llamada ‘Cheat Sheet’). Las principales webs que tienen ligas de fantasy también tienen ‘Mock Drafts’, simulaciones muy útiles para prepararse para el día D.
Evite distracciones;
Apague la tele, cierre la puerta de la habitación con llave y no beba mucho. Un momento de desatención puede significar draftear a Eli en vez de Peyton Manning en la tercera ronda.
Deje la pasión de lado;
Da igual que sea de los Cowboys, si LeSean McCoy está disponible en la segunda ronda, tiene que escogerlo. Y puede que, aunque seas muy fan de los Ravens, no quieras a nadie más de tu equipo que Jamaal Charles en tu plantilla de fantasy este año. Uno tiene que dejar la afición de lado a la hora del draft y elegir los mejores jugadores, auque sean del equipo que más odia.
Entienda la posición media del draft de cada jugador (ADP)
Muchas webs especializadas analizan la posición media en la que cada jugador es drafteado. Eso se llama ‘Average Draft Position’ (ADP) y es una herramienta FUNDAMENTAL a la hora del draft.
Por ejemplo, por más que a uno le guste Russell Wilson (Sea) y crea que él será uno de los tres mejores quarterbacks de este año, no le va a draftear en la primera o segunda ronda porque su posición media de draft es en la quinta.
Por otro lado, aunque uno crea que la segunda ronda es demasiado pronto para draftear a Jimmy Graham (NO - TE), si él está disponible, el valor que ofrece es demasiado bueno para ser ignorado.
La idea es no tener prisa para draftear a un jugador antes del momento adecuado por mucho que le guste y también saber identificar cuándo un chollo está delante de usted. La paciencia es fundamental en una liga de fantasy.
Siempre que sea posible, escoja el mejor jugador disponible, independiente de la posición;
No se preocupe con cubrir todas las posiciones de su equipo titular cuanto antes. Es más importante tener el máximo de jugadores de impacto, independiente de la posición que jueguen. Lógicamente, quieres tener un equipo equilibrado, pero muchas veces las opciones disponibles en la posición que estás buscando no son las ideales. Es mejor tener tres excelentes WR que unos jugadores mediocres en otras posiciones.
Apueste siempre en jugadores jóvenes y prometedores;
Esta teoría es muy sencilla. Jugadores como Arian Foster o Marshawn Lynch llevan años teniendo temporadas muy buenas, pero han llegado a una edad peligrosa y puede que la próxima temporada sea la que caigan en producción. Por otro lado, Eddie Lacy y Le'Veon Bell ofrecen lo contrario. Además de números sólidos de alto nivel, la posibilidad de que este año salten a lo más alto en sus respectivas posiciones es enorme.
Intente escoger un segundo equipo titular en cada draft;
Josh Gordon, Knowshon Moreno, Antonio Brown, Andy Dalton, Julius Thomas. Todos ellos terminaron entre los cinco mejores de sus posiciones y fueron drafteados después de la quinta ronda. Algunos, como Moreno, Dalton y Thomas no fueron siquiera drafteados en muchas ligas.
Los primeros rounds son importantísimos para formar la base de tu equipo, pero la gran mayoría de los campeones de las ligas son los que encuentran casos como los de arriba. Por eso es tan importante estar atento durante TODO el draft y saber donde existen las posibilidades de encontrar los Josh Gordon y Julius Thomas de este año.
No elijas una defensa y un kicker hasta los últimos dos o tres rounds;
Por todo lo que he dicho en los consejos anteriores.
No se preocupe tanto con proteger su titular drafteando a su reserva;
Antes existía una tendencia a ‘esposar’ tu RB titular, cogiendo a su reserva al final del draft. El problema es que cada vez más, en caso de lesión, los equipos dejan de usar un running back para dividir las carreras entre dos o tres reservas, que tienen diferentes estilos de juego. Mejor usar este espacio en el draft para escoger a un WR prometedor o a un RB de un equipo donde el escenario todavía no es claro y que tiene posibilidad de asumir el papel de titular, como los que pasó con Knowshon Moreno en Denver el año pasado. Los casos de los Browns o Dolphins esta temporada son muy parecidos.